Según el New York Times, una escuela de cocina americana ofrece cursos de fotografía y estilismo culinario. Estos cursos están destinados para la red social Instagram. Permiten a los estudiantes preparar unos platos “instagramables”.
Desde el mes de mayo pasado, el Instituto Culinario Americano enseña a los estudiantes a crear platos que atraerán las miradas y los likes en Instagram. En otras palabras, estos cursos permiten dominar la presentación de un plato, que podrá ser después ser fotografiado y publicado en la red social.
Los estudiantes actúan como fotógrafos improvisados. Trabajan el aspecto del plato para que cuadre bien con las variaciones de la luz natural. Cada plato está dispuesto como una verdadera obra maestra artística. Se juega con los colores y las texturas. Los estudiantes apuestan por las verduras verdes, ya que son unos alimentos que brillan, y por una carne todavía sangrante. El objetivo es obtener un plato que de ganas, ¡y que haga clic!
Hoy en día, Instagram se ha convertido en la verdadera referencia en materia de arte culinario. Es ahí donde los consumidores acuden cuando quieren informarse sobre un restaurante. En ésta red social, los clientes postean fotografías de su comida, del lugar donde comen y de los menús servidos. También publican su opinión. Cuantos más hastags tenga una foto en Instagram, más se considerará como deliciosa. ¡La influencia de Instagram sobre la comida es tal que podría cambiar radicalmente los objetivos de los chefs profesionales!
